Clases presenciales: no hay información sobre cómo se adaptará el transporte en San Luis

Tras el anuncio de que en la provincia, el inicio del ciclo lectivo 2021 se hará de forma presencial, los padres comenzaron a pensar en todo lo que involucrará la nueva modalidad en medio de la pandemia. Más allá de los protocolos dentro de las escuelas, el traslado es otra de las preocupaciones actuales.

En la ciudad de San Luis, muchos alumnos utilizan el servicio de Transpuntano para llegar a los establecimientos. Sin embargo, actualmente la prestación se está dando de manera reducida y no se conoce cómo trabajarán a partir del 1° de marzo.

También, aunque en menor magnitud, otros requieren el transporte interurbano porque los colegios se encuentran en diferentes ciudades en las que residen.

Hasta este viernes, la gestión de Alberto Rodríguez Saá no ha informado cómo se adaptará el sistema público para llevar tranquilidad a las familias, ni qué acciones se están realizando por este tema.

En contraposición, el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (donde también habrá presencialidad), Horacio Rodríguez Larreta que tomarán medidas para dar seguridad a los estudiantes y maestros que deban utilizarlo.

En CABA ya se han concretado reuniones entre las autoridades y referentes del sector. Los puntos de los que se habló fueron frecuencias y disposiciones para respetar el distanciamiento y llegar más rápido.

Un poco más cerca, en Mendoza, el lunes pasado hubo un encuentro entre la Provincia y representantes del Transporte para conocer las inquietudes y dialogar sobre los protocolos.

El servicio en la ciudad más grande

Hasta el 2019, último año en que se implementó el boleto estudiantil gratuito en San Luis, hubo 14.179 chicos que contaron con el beneficio, es decir, que dependían del transporte público para viajar. 12.869 pertenecían a los niveles primario y secundario de instituciones públicas y 1307 a privadas.

A estos números se deben sumar los de aquellos docentes, ordenanzas y personal administrativo de los colegios que deben utilizar el servicio.

Por la crisis sanitaria, la intendencia de Sergio Tamayo dispuso una disminución en las frecuencias, que actualmente funcionan como sábado o domingo. Dependiendo de las líneas, el usuario debe esperar entre 32 y 99 minutos.

El panorama se agrava cuando los tutores piensan en lo que involucrará llevar a los chicos a clases debido a que hoy el servicio se está prestando con 30 unidades en la calle y esto incrementará la demanda.

El presidente de la empresa, Claudio Grippo dio una conferencia de prensa días pasados para comunicar recorridos en seis líneas, pero hizo alusión a mejoras que vayan a implementarse.

Esta situación, generó que los vecinos expresaran los interrogantes y quejas a través de las redes sociales.

“La solución es sumar más líneas, más unidades, más colectivos. ¡La gente viaja hacinada y en época de ‘pandemia’! ¿Qué va a pasar cuando los chicos vuelvan a la escuela?”, cuestionó Miriam Ibáñez

La inquietud de los padres se agravó debido a estas modificaciones en los trayectos porque en algunos tendrán que realizar doble viaje. Uno de los casos es para quienes circulan en la OK, donde se dispuso una separación del recorrido en dos ramales.

Puntualmente, los chicos que utilicen Transpuntano cuatro veces al día, por semana deberán gastar $700, mientras que al mes serán $2.800.

Romina Parada calificó como “una locura lo que van a tener que pagar en colectivo y ni hablar de los niños para ir a la escuela”.

En consonancia se expresó Natalia Arriola y puntualizó en un sector de la ciudad a la que sólo acude la E: “Una sola línea para los barrios Estrella del Sur, Solidaridad y 400 Viviendas, además de que pasa cada una hora o más. Ni me quiero imaginar cuando los chicos comiencen las clases”.

Así, han sido numerosos los interrogantes de cara al retorno a las aulas. Sin embargo, no hay información certera de parte de las autoridades provinciales y municipales.